lunes, marzo 14, 2005

PRIMAVERA VIEJA - Luis Cernuda

Ahora, al poniente morado de la tarde,
En flor ya los magnolios mojados de rocío,
Pasar aquellas calles, mientras crece
La luna por el aire, será soñar despierto.

El cielo con su queja harán más vasto
Bandos de golondrinas: el agua en una fuente
Librará puramente la honda voz de la tierra;
Luego el cielo y la tierra quedarán silenciosos.

En el rincón de algún compás, a solas
Con la frente en la mano, un fantasma
Que vuelve, ¿llorarías pensando
Cuán bella fue la vida y cuán inútil?.

2 comentarios:

Dolores_Danaher dijo...

Cuando leo este poema huelo el azahar en las calles de Córdoba, de Granada, de Sevilla...en un patio cerrado con una fuente c¡que canta aquello que el alma necesita oir las tardes dulzonas de finales de verano...

Cuando leo este poema vuelvo uno por uno a todos los agostos de mi vida, que cada año hacen más larga la cadena...y siento el gusto del melocotón maduro en el paladar...y cumplo un año más...y vuelvo a ser flor de almendro...

Dolores_Danaher dijo...

Agosto.
Contraponientes
de melocotón y azúcar,
y el sol dentro de la tarde,
como el hueso en una fruta.

La panocha guarda intacta
su risa amarilla y dura.

Agosto.
Los niños comen
pan moreno y rica luna.




Federico García Lorca